*El ego es como un huevo que se resiste al cambio…
Tan solo, cuando la clara y la yema se funden en una sola, es cuando nace una nueva vida. Mientras tanto, continuamos en una dualidad permanente debatiendo entre pensamientos y sentimientos…
*cuenta Alejandro Jodorowsky, en Evangelios para sanar
No queremos cambiar, no lo queremos en absoluto.
El ego se aferra.
El ego negativo sabe que debe estallar para que nosotros cambiemos y no está dispuesto a hacerlo.
Es como un huevo; en un momento dado, el huevo comienza a temblar y se dice “¡Caramba! ¡Cómo me gustaría que me metieran en agua hiviendo para hacerme más duro y así ya no tendría que hacerme un pollo que me rompa desde el interior!”
Dice Marianne Costa que queremos mejorar pero no cambiar, ya que cambiando morimos a lo que éramos.
El ego se resiste a todo lo que huela a muerte.
El ego se aferra.
El ego negativo sabe que debe estallar para que nosotros cambiemos y no está dispuesto a hacerlo.
Es como un huevo; en un momento dado, el huevo comienza a temblar y se dice “¡Caramba! ¡Cómo me gustaría que me metieran en agua hiviendo para hacerme más duro y así ya no tendría que hacerme un pollo que me rompa desde el interior!”
Dice Marianne Costa que queremos mejorar pero no cambiar, ya que cambiando morimos a lo que éramos.
El ego se resiste a todo lo que huela a muerte.
Cuando decimos, “quiero mejorar”, se trata de una trampa, en realidad decimos “me quedo igual con algún remiendo”.
La primera pregunta que Milton Erickson hacía a algunos de sus pacientes cuando se presentaban en la consulta era: “¿Está usted dispuesto a hacer cualquier cosa para conseguir el cambio?”.
Si el paciente decía que no, o dudaba, Erickson le despedía diciéndole que volviera cuando estuviera dispuesto a ello.
El "EGO", palabra tan cortita y tan significativa a la vez, a la que se debe prestar mucha atención si queremos comenzar por nuestro "cambio" para vivir más felices. Mejor calidad de vida
El "EGO" es la idea que cada uno de nosotros tiene de sí mismo, es sólo una idea, pero una idea que ejerce una gran influencia.
Siendo el "EGO" la idea que tenemos de nosotros mismos, de nuestro cuerpo, mente y alma, podemos obstaculizar con él el conocer nuestro verdadero "YO". Aceptación
El "EGO" es una disposición errónea del pensamiento que intenta presentarnos como a nosotros nos gustaría ser en lugar de cómo somos en realidad. Soy lo que soy.
El "EGO" se preocupa mucho por "el que dirán" y hace que actuemos de manera tal que respondamos a las exigencias de los demás. Mandatos.
El "EGO" es cobarde, porque por temor a que usted se dé cuenta de las manipulaciones que hace con sus actitudes lo carga a usted de culpas y miedos para que le siga obedeciendo. Dependencia.
La primera pregunta que Milton Erickson hacía a algunos de sus pacientes cuando se presentaban en la consulta era: “¿Está usted dispuesto a hacer cualquier cosa para conseguir el cambio?”.
Si el paciente decía que no, o dudaba, Erickson le despedía diciéndole que volviera cuando estuviera dispuesto a ello.
El "EGO", palabra tan cortita y tan significativa a la vez, a la que se debe prestar mucha atención si queremos comenzar por nuestro "cambio" para vivir más felices. Mejor calidad de vida
El "EGO" es la idea que cada uno de nosotros tiene de sí mismo, es sólo una idea, pero una idea que ejerce una gran influencia.
Siendo el "EGO" la idea que tenemos de nosotros mismos, de nuestro cuerpo, mente y alma, podemos obstaculizar con él el conocer nuestro verdadero "YO". Aceptación
El "EGO" es una disposición errónea del pensamiento que intenta presentarnos como a nosotros nos gustaría ser en lugar de cómo somos en realidad. Soy lo que soy.
El "EGO" se preocupa mucho por "el que dirán" y hace que actuemos de manera tal que respondamos a las exigencias de los demás. Mandatos.
El "EGO" es cobarde, porque por temor a que usted se dé cuenta de las manipulaciones que hace con sus actitudes lo carga a usted de culpas y miedos para que le siga obedeciendo. Dependencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario